Sinopsis:
Max Winters, un escritor pulp de la década de 1930 en Nueva York, se ve envuelto en una historia no muy diferente a las que produce a cinco centavos la palabra: la de un forajido del Lejano Oeste que administra justicia con un revolver. ¿Podrá Max hacer lo mismo cuando lo persigan ladrones de bancos, espías nazis y enemigos de su pasado? Mitad thriller, mitad reflexión sobre una vida de violencia, Pulp no se parece a nada que Brubaker y Phillips hayan hecho antes. Esta celebración de la ficción pulp ambientada en un mundo al borde del abismo es otro tomo imprescindible de uno de los equipos más aclamados de los cómics.
Nuestra opinión sobre Pulp:
El propio título ya nos da idea de qué tipo de novela gráfica se trata. Efectivamente, Pulp es, como ya apuntábamos al comentar Reckless, un “tipo de literatura que nace en EE.UU a principios de los años veinte del siglo pasado. Se caracteriza por una estética de colores vivos, lenguaje sencillo y ritmo rápido”.
No obstante, el argumento difiere mucho del de la obra mencionada. Si bien la estética es la misma, Pulp añade un plus y profundiza en el ambiente y las circunstancias que rodean al personaje protagonista.
Lo que quizás puede confundir un poco es que la portada recrea una escena de western, lo que haría presuponer que ese será el tema del libro, pero no. Es una imagen que corresponde a la actividad del protagonista Max Winters, creador de este tipo de historias. Pero también utiliza dicha estética para contarnos su pasado en clave de western, lo cual permite diferenciar perfectamente los dos niveles de la narración.
La trama de Pulp va más allá de la historia de policías y ladrones para adquirir un tono más intimista, donde los sentimientos y la reflexión predominan sobre la acción. Pero donde también quedan expuestos temas que atañen a la sociedad en general y no solo al protagonista, como la violencia que impera en la sociedad americana y la denuncia de actitudes fascistas y el auge del nazismo en algunos sectores de dicha sociedad.
El paralelismo que se establece entre el pasado del protagonista, escenificado en forma de western, y su presente no tan distinto, señala que nada ha cambiado, la forma puede haber evolucionado pero el fondo sigue rigiéndose por las mismas leyes atávicas del pasado.
Las ilustraciones por sí solas ya merecen ser “leídas”, sin necesidad de texto alguno. Recrean perfectamente el ambiente que requiere el texto. La precisión y exactitud del trazo en la creación de personajes distintos, con un realismo en las facciones y en la reproducción de escenas como si de fotogramas se tratara, hacen que el lector se sienta inmerso en la historia. También a resaltar la eficacia en el tratamiento del color para crear ambientes diferentes y para diferenciar los diferentes niveles del relato.
Sobre los autores:
Ed Brubaker nace en 1966 en Maryland (EE.UU). Profesionalmente, destaca su faceta como guionista, aunque sus inicios en el mundo del cómic fueron como dibujante de historias como Lowlife, de carácter autobiográfico.
Con The Fall inicia su andadura como escritor, lo que le abrirá las puertas para trabajar en Vértigo, propiedad de DC. Más tarde, en Marvel, colaborando en las famosas series en series tan conocidas como Batman, Daredevil o Capitán América, entre otras.
A partir de 2012, trabaja de forma independiente en colaboración con Sean Philips. Juntos crean las series de género negro por las que han sido ampliamente premiados. Algunas de ellas son Criminal, Fade Out, Kill or be Killed y Reckless.
Su obra ha merecido diversos reconocimientos como el Premio Eisner (en siete ocasiones) o el Harvey.
Sean Philips nace en 1965 en Reino Unido. Se graduó en la Facultad de Arte y empezó a trabajar como dibujante de cómics en 1988. Aunque ha trabajado con varios autores, lo más conocido de su obra lo constituyen las series realizadas en colaboración con Ed Brubaker, con el que sigue trabajando en la actualidad.
Otros libros de los autores:
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